Postal de "Info de Ushuaia"
Desde la mañana de ese día estuve atento monitoreando la salida del vuelo desde El Palomar con la APP de Flightradar24. Allí supe que el avión había partido con 20' de demora, pero llegaría unos minutos antes de lo estipulado. Dos horas previas a la partida, salimos para el Aeropuerto.
Aquí les muestro el aviso publicitando de JetSmart con el importante descuento por la inauguración de la ruta. Gracias a esa promoción pude comenzar el año en la "ciudad más austral del mundo" junto a los familiares que viven allí.
En el mostrador asignado a la empresa. Ya tenía mi web chek-in (que verán en la foto siguiente), pero debía despachar el equipaje de bodega (Aunque llevaba una carry-on; costaba los mismo que fuese a bodega o a cabina, pero en bodega podría lleva más peso).
A partir de aquí noté varios "detalles", que estimo se deben a la inexperiencia del personal y demuestran las diferencias entre las low cost y las compañías aéreas tradicionales. Comenzaron con la excesiva demora en el trámite. Tardé 15' en llegar al mostrador, a pesar de que solo había dos grupos de pasajeros delante mío. Había dos personas, pero solo la chica que aparentemente estaba practicando atendía a los pasajeros y el otro controlaba la fila tratando a los pasajeros en forma un poco autoritaria (Consultaba si teníamos hecho el check-in, si pagamos el equipaje, que tengamos a mano el documento, etc.). Le pregunté que en vez de hacer eso, porque no iba a ayudar a su compañera y agilizaba el chequeo de los pasajeros, pero no le gustó el comentario, se molestó y se fue. Cuando me retire del mostrador la fila era larguísima. Más adelante les cuento otros detalles.
Tanto demoró ese simple trámite que mi familia no pudo esperar más y nos despedimos mientras estaba en la fila.
Enseguida subí a Preembarque y me dirigí a la puerta asignada. Junto a ella había unos asientos con vista a la plataforma, ideales para ver el movimiento del aeropuerto.
Nueve minutos antes del horario, aterriza el avión: A-320-232 LV-IVN cn8730. Cuyo primer vuelo fue en feb'19 y ha sido entregado a la empresa en 15/Nov/19. Solamente 48 días de uso.
La aeronave se desplaza a plataforma y se estaciona frente a nosotros. Comienzan a descender los pasajeros, lo que deben subir por escalera a nuestro nivel y salir por la misma puerta de embarque, pasando junto a nosotros. Y aquí, el segundo detalle. Las compañías low cost minimizan el tiempo en las escalas. para ello, por ejemplo, preparan a los pasajeros que abordarán el avión separándolos por el número de fila. Apenas salen todos los pasajeros, comienzan a embarcar los del vuelo siguiente.
Me ha sucedido en Vueling, EasyJet y en JetSmart Chile.
En este caso, la Srta. (la misma que estaba en el mostrador de check-in) al hacer el primer llamado a embarcar, pidió que se formaran dos hileras (una para filas 1 a 16 y otra 17 a 32). Cuando los pasajeros estaban acomodándose, la otra persona del personal de tierra invirtió el orden de las hileras y los pasajeros quedaron desorientados. Por otro lado, cuando el embarque es a través de escalerillas para las puertas delantera y trasera lo lógico es armar una sola hilera e informar a los pasajeros que se dirijan a una u otra puerta dependiendo de la fila asignada. Como tenía la fila 2, esperé hasta casi el final.
Cuando llegue a la Plataforma y tomé esta foto veo que estaban subiendo una anciana en silla de ruedas. El sentido común dice que deben embarcar en primer lugar a las personas con discapacidades. Acá lo estaban haciendo casi al final. Al acercarme al pie de la escalera para esperar mi turno. Me dicen que ascienda por la puerta trasera.
Cada aparato de la empresa tiene un animal autóctono (Cardenal, Jaguarete y Huemul en la filial argentina). Este nuevo avión, lleva en la cola la figura de un "zorro".
Es el zorro culpeo (Lycalopex culpaeus) que habita en
montañas, praderas, desiertos, y bosques. Se distribuye especialmente a
lo largo de la Cordillera de los Andes, desde el sur de Colombia, Ecuador, Perú, Bolivia, Chile,
y la mitad de Argentina por el oeste, llegando por el sur
hasta el Archipiélago de Tierra del Fuego. En Chile y
Argentina está la mayor población, especialmente en la zona patagónica.
Como me indicaron, asciendo por puerta trasera
Cuando
estuve arriba debí atravesar todo el avión para llegar a mi asiento. Muchos pasajeros de pie acomodando sus equipajes u otros buscando su ubicación.
¡Al acercarme a la fila 2, el personal de tierra me increpa (en malos términos) preguntado qué estaba haciendo allí! (Le faltó decir "que carajo estaba haciendo allí"). Yo solo quería ubicarme en la butaca.
Obviamente estaba cansado por tener que alzar la silla de ruedas con la sra. u ofuscado por la situación.
Después noto el porqué. Aún el personal no había sentado
a la anciana. La sra. tenía originalmente asignada otra fila y ante el impedimento
de caminar debían ubicarla en la primera fila. Esos lugares ya estaban ocupados
por pasajeros que habían pagado para estar en ese sitio (el más caro, por cierto). Las TCP
debieron convencer a las personas para el cambio de asiento y hallaron espacio en la fila de emergencia. Otro contratiempo que fue mal manejado
y evitable.
Ya sentado, tomé esta imagen de la plataforma con los últimos pasajeros. Esas personas que fueron derivados a la puerta trasera, debieron volver porque se les habían sacado la escalerilla o cerrado la puerta.
Todo estaba listo, cerraron la puerta trasera y debían hacer lo mismo con la delantera. Pero al personal de tierra no les daban los números. Ascendieron al avión para contar los pasajeros, nombraron a algunos para saber si habían abordado. Subieron y bajaron dos o tres veces controlando las planillas. Las Tripulantes estaban desconcertadas. La oficina de despacho tardó varios minutos en confirmar la cantidad de pasajeros. Finalmente, la Jefa de Cabina -Carolina- se hizo cargo y aclaró las cuentas: 174 pasajeros (93% de ocupación).
Al estar en segunda fila, fui testigo de todo lo que les estoy contando.
Evidentemente no era un buen día para esos empleados. No sabían el procedimiento y/o eran muy nuevos en su trabajo. !!!Todo muy desordenado!!!
Mientras esto sucedía, nos daban el mensaje de Bienvenida. Después cerraron puertas y empezamos el taxeo.
Nos encaminamos a Cabecera 07
Según la App estabamos pasando Comodoro Rivadavia.
Ahora alcanzamos Punta Ninfas.
En estas imágenes, la Península Valdés y las Salinas. La Salina Grande es una gran depresión endorreica de forma circular debido a hundimientos tectónicos.
Tal depresión originó una laguna temporal que, al desecarse, creó salares (salinas y salitrales) de dimensiones medianas. Se encuentra a 42 m por debajo del nivel del mar.
Aeropuerto de San Fernando.
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