ATARDECERES DE CHILE
La famosa pandemia del 2020, frustró nuestras intenciones de ir al Norte de Chile. Unos años después, y para aprovechar mis vacaciones de verano, pude concretar este viaje aunque sin mi hija y cambiando un poco el Itinerario. JetSmart tenía una promoción para Santiago desde Aeroparque y a ese vuelo, le agregué con la misma aerolínea, los tramos Santiago a Iquique (SCL-IQQ), Iquique a La Serena (IQQ-LSC) y La Serena a Santiago (LSC-SCL). Mi intención era conocer el Norte chileno y sus famosas playas, a su vez corroborar si el agua es más o menos fría que la playas de la costa atlántica argentina. Lo que les puedo asegurar, y por eso elegí el título, es que presencié unos espectaculares atardeceres cayendo el sol en el mar; a los que no estamos acostumbrados los argentinos.
El viaje no empezó bien porque mi vuelo desde Aeroparque fue cancelado y partió al otro día desde Ezeiza. La compañia nos pagó la noche de Hotel* y los remises desde y hacia los aeropuertos. *Preferí quedarme en la casa de mi hija y poder arreglar tranquilo, los inconvenientes que me ocasionó esa cancelación. No quiero agobiarlos con todos los detalles, solo le resumo que de los 5 tramos que volé con JetSmart, 4 fueron cancelados o reprogramados. Mi Itinerario original se vió desplazado un día, por lo que tuve que cambiar TODAS las reservas hoteles y agregar una noche de Hotel en Santiago a la ida, que no estaba prevista, los correspondientes transfer; y otra noche más al regreso a Santiago. Si desean les amplío por privado.
Así se veía Ezeiza en la mañana del 2 de enero.
Otro de los cambios, este vuelo sería por JS Argentina y me correspondió el A-320-200 LV-IVN cn8730 con el zorro en la cola en el vuelo WJ-3012
Almuerzo en Ezeiza y postre y café durante el vuelo.
Para este tramo viajé en el recientemente incorporado A-321-271neo, 271NX ó 271N, matrícula CC-AWT con una enorme "ballena jorobada" en la cola, cumpliendo el vuelo JA-110. Este aparato llegó a JetSmart el 29 de Julio de 2022. Es diferente a los A321 de otras aerolíneas porque tiene aumentada su capacidad a 240 pasajeros.
La mitad del vuelo (de 2 horas aproximadamente) transcurrieron sobre la tierra y la segunda parte sobre el mar. Aquí pudimos ver a Valparaiso, Viña y Concón (de izquierda a derecha).
Ahora pasando sobre el Aeropuerto La Florida de La Serena. O sea, tuve la posibilidad de sobrevolar los lugares que visitaría unos días después.
Fachada de Aeropuerto "Gral. Diego Aracena" que se encuentra a 45 km de la ciudad de Iquique, a la que se llega por la Autopista Nº1. Me contaron y pude comprobarlo que hace años que está en refacciones y están tardando mucho en terminarlo.
Primera y sorprendente imagen al salir del Aeropuerto, confirmando que estábamos en el "desierto".
En apenas 30', el transfer me llevó al Hostal Aloha Inn (Pintado de color turquesa) sobre el céntrico Boulevar Baquedano, donde me alojé.
Por la noche, anduve por el centro a fin de encontrar una agencia de viajes y cenar. Aquí la Torre del Reloj (de 1878) en la Plaza Arturo Pratt. La Torre del Reloj junto a los edificios que rodean la plaza Prat —el Teatro Municipal, el edificio de la Sociedad Protectora de Empleados de Tarapacá, el Casino Español y el Club Croata— constituye una de las expresiones urbanas más representativas del periodo salitrero.
Contraté la Excursión más tradicional que se hace desde Iquique: al desierto, a las salitreras y el oasis de Pica. La primer parada fue en la localidad de "Alto Hospicio", para tener esta impresionante vista del la ciudad a los pies. La duna que se ve mas cerca es el Cerro Dragón, formada por los vientos y donde se realizan actividades de "sandboard" o el más vulgar "culo patín".
Seguimos nuestro camino por la Reserva Nacional Pampa del Tamarugal, hasta el pueblo de La Tirana. Donde se realiza, en julio, la Fiesta Religiosa de la Virgen del Carmen. Abajo, la imagen de la Plaza adornada para Navidad. <Me resultó incongruente encontrar junto al árbol de navidad, imágenes de muñecos de nieve y pinos nevados>. Más allá de eso el pueblo es muy pintoresco, la iglesia muy bonita y tenía un pesebre con figuras de gran tamaño con ropas típicas de la zona y los camellos cambiados por llamas.
Un "mágico atardecer" desde las alturas, con espléndidas vistas panorámicas de la playa y la ciudad. Mientras degustaba un "pico sour campanario" (más cantidad que el común) y una extraordinaria picada puede ver como caía el sol y se hacía la noche.
El último día en Iquique, recorrí el Mall Zofri (zona franca) y fui al puerto para hacer una navegación a la boya que marca el lugar de la Combate Naval de Iquique (21 de mayo de 1879) de la Guerra del Pacífico y donde se hundió la Corbeta Esmeralda. Cuya réplica se puede ver en la siguiente foto y que se encuentra cerca del muelle de pasajeros.
En la siguiente imagen, la Plaza e Iglesia Santo Domingo (de 1775 en estilo manierista y remodelada en 1850 y 1958 con un ecléctico campanario).
Una perspectiva de la Calle Los Carrera donde se ve en primer plano el Edificio de Tribunales y al fondo la Catedral, todo frente a la Plaza de Armas (ahora llamada "de la Ciudadanía"). Por ser sábado había una gran Feria artesanal y gastronómica, donde probé unos platos típicos. Recuerdo unas sopaipillas con aceitunas negras y otras con palta.
El estilo neocolonial caracteriza a las construcciones del centro histórico de La Serena. Me hizo acordar a la Ciudad de Salta.
El vuelo fue bastante corto, apenas un poco más de media hora. No enviaron al "ala nacional" de la nueva terminal (T2), pero como se sale por la terminal vieja (T1), se debe hacer todo un recorrido interno de varios kilómetros. Finalmente estuve afuera e hice otra caminata hasta la Terminal de ómnibus con servicios al Aeropuerto (Centropuerto y TurBus). Una muy buena idea.
Frente del Hostal Vista Hermosa 17 con una excelente ubicación.
El día siguiente amaneció nublado, ideal para hacer la visita a Valparaíso. A una cuadra del hostal está la Estación Miramar del Metro. Después de esa estación, el tren sale a la superficie y las vías corren muy cerca del mar. Tras un breve viaje estuve en la Estación Puerto, terminal del recorrido.
Imagen tomada por mi, mostrando las casas que cuelgan del cerro, típica postal de la ciudad.
Cruce de las calles Miramar hacia arriba y Alvaro Besa hacia abajo
El Puerto de Valparaíso es uno de los más
importantes del país, tanto que el gentilicio
para denominar a sus habitantes es “porteños”
(Igual que a los que viven en Buenos Aires).
Estación del Metro a la izquierda y la Aduana a
la derecha, formando un portal al Puerto de Valparaíso.
Después de recorrer los intrincados pasajes,
calles, corredores y escaleras de la ciudad; almorzar en el puerto y andar en trolebús…
regresé a Viña.
Aproveché la mañana del día siguiente para
explorar el Cerro Castillo, colmado de elegantes residencia (entre ellas, una
para el Presidente de la República). Desde lo alto del Mirador Dr. Jorge
Alessandri se puede ver la Plaza del Reloj de Flores y la Playa Caleta Abarca.
Bajé para almorzar y visitar el centro de Viña,
me llegué hasta el anfiteatro donde se realiza el famoso Festival en la Quinta
Vergara. Es imponente!
Luego tomé “una micro” hasta la playa Salinas.
Pero la siguiente foto es de la Av. Libertad con estos enormes edificios.
¡Tres momentos de cuando probé la temperatura
del agua!!! Es un “acting” porque no
estaba tan fría.
Volviendo al centro y después de pasar la Playa del Sol, se encuentra el Muelle Vergara que ha sido reparado en 2016
y ahora sirve de paseo y lugar para los pescadores.
Playa del Sol desde arriba del muelle.
Otro impactante atardecer en el mar.
Regresé a Santiago tomando un ómnibus hasta la
Terminal Pajaritos y desde allí el Metro al Centro de la ciudad.
Me alojé en el Hotel Plaza Londres 77, en medio del tradicional Barrio
Paris-Londres.
Una de las cosas que hice en Santiago, es ir a
hacer compras al Mall Parque Arauco,
para ello tomé un bus que fue por la Autopista Costanera Norte del otro lado
del Río Mapocho. Desde allí, tuve una
vista de los rascacielos santiaguinos, entre ellos la Torre Costanera Center, la más alta de Sudamérica.
Vista del Patio de Comidas al aire libre del
Shopping.
Después de pasar por los controles de
seguridad, migraciones y free-shop se accede a este gran salón de distribución
de pasajeros, desde donde se abren los pasillos a las diferentes alas del
aeropuerto.
Sobre los Andes viendo el último atardecer de
este viaje.
Nuevo intento de tomar una selfie en uno de los
diminutos baños del avión.
Un chileno me aconsejó que para pasar desapercibido
y, por ejemplo, no ser estafado por los vendedores y taxista, debía decir
algunas palabras como “weon”, “al tiro”, etc. y terminar los verbos con “i”
como cachai, llegai, etc. de esta forma me mimetizaría con la población local. “La
cachai weon?”
Deseo haya sido de su agrado!!! Hasta la
próxima!!!
Genial Juanjo! Es muy interesante el norte de Chile, ya que no es un destino habitual de los argentinos. Santiago y Viña me encanta! Que bueno que pudiste acomodar los vuelos y hoteles después del descalabro de reprogramaciónes que sufriste. Jaja, que gracioso el medidor de temperatura del agua del mar 😅
ResponderBorrarMuchas Gracias Leo por leerlo y por ayudarme con tus comentarios a mejorar los Reportes.
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